De octubre a marzo los cerdos ibéricos disfrutan de su estancia en la dehesa
Los productos obtenidos de los cerdos ibéricos alimentados en su fase de engorde con bellotas y hierbas son de una categoría superior; gracias a los recursos naturales que ofrece la dehesa, esta etapa también se conoce como estancia en Montanera.
Para quienes se preguntan qué implica la estancia en montanera, hemos intentando resumirlo con varias cuestiones:
¿Qué es la dehesa?
Es una parte indispensable del paisaje de España puesto que ocupa aproximadamente 3,5 millones de hectáreas de nuestro país, repartidas principalmente entre las comunidades de Andalucía, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Madrid y Extremadura.
La dehesa es un bosque en el que conviven diferentes árboles como el roble o el alcornoque, aunque es la encina, el principal motor de este ecosistema y cuyo fruto, la bellota, es la base de la estancia en montanera.
¿Por qué es tan importante la estancia en montanera?
Es la última fase de la cría del cerdo ibérico, en la que éste se alimenta y se ejercita en la dehesa, en la cual pasta libremente en busca de su alimento favorito.
Durante la estancia en la dehesa, los cerdos llevan una vida tranquila y placentera.
Hay que destacar que la importancia de esta fase no reside únicamente en cómo se alimentan, sino también en el ejercicio diario que realizan. Al estar en libertad, los cerdos recorren en torno a 12-15 km diarios lo que confiere que su carne sea de mayor calidad, ya que a la vez que engordan, se produce la infiltración de la grasa en sus carnes magras.
Además, si tenemos en cuenta que la estancia en montanera, coincide con la época de lluvias, tenemos como resultado el resort perfecto para la vida de nuestros animales.
¿Cuál es el objetivo?
Que los animales alcancen su engorde final de forma totalmente natural.
La bellota le otorga al producto un sabor característico y lo dota de una excepcional composición en ácidos grasos insaturados, dónde el mayoritario es el ácido oleico, lo que les convierte en productos con un perfil lípido muy saludable.
Los cerdos ibéricos llegan a consumir entre seis y diez kilos de bellotas y un kilo de pastos frescos al día.
En Jamones Gerardo Manzano apostamos por la naturalidad y tradición de nuestros productos por ello es tan importante esta fase para nosotros.
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